Los azotadores, las fustas y los látigos eróticos o sexuales provocan una gran excitación solo por el hecho de estar presentes, la expectación crece y la imaginación se dispara moviéndose a mil entre imágenes de dolor y placer.
Novelas y zagas como las 50 sombras han hecho que el uso de este tipo de elementos como los azotadores se hicieran más conocidos y muchas personas hayan querido experimentar con juegos eróticos de dominación como el spanking, el bondage y el BDSM. Fustas, Azotador bdsm y pequeños látigos son casi un imprescindible para los practicantes de este tipo de juegos. Los azotes en el culo se han convertido en el principal juego de rol para todos los principiantes.
Los azotadores pueden ser de diferentes materiales y formas. Algunos hechos de tiras, o con tiras, otros de un mango con una pieza en la punta y otros de una sola pieza a modo de paleta. Los látigos eróticos están formados, generalmente, por un mango y varias tiras que pueden ser de cuero, de tela, de goma, silicona, etc.
El material de las tiras es lo que hace que sean más dolorosos o más suaves, aunque no por ello menos excitante. Las fustas son el tipo de azotador bdsm de más fácil manejo, están formadas por un mango con la pieza azotadora en la punta que, muchas veces, es un rectángulo doblado a la mitad; esta pieza, al ser doble, produce un ruido muy excitante.
Los látigos largos y de materiales duros como el cuero, son algo más complicados ya que se requiere cierta destreza para utilizarlos. Este tipo de látigo se suele utilizar, no sobre el cuerpo del castigado, sino mas bien como elemento intimidante pegando en el suelo o en otras superficies como lo hacen los domadores con sus fieras.